Coincidiendo con la celebración de los diez años de la feria, uno de los encuentros más gratos, como venezolana, fue la conversación que tuvimos durante unos minutos con nuestro gran artista Carlos Cruz-Diez quien participó con una intervención del paso peatonal frente a la sede principal de esta feria.
Creo que es muy importante su presencia en la feria pues contribuye a que su obra traspase las fronteras de nuestro país y este es uno de los mejores escenarios para que así sea. La feria se desarrolla en un lugar muy accesible y hay una integración en toda la ciudad, donde se celebran muchos eventos todos relacionados con la feria de Art Basel, que sería como el centro de todas las actividades. Las galerías están dispuestas a recibir al visitante aunque no estén dentro de la feria, diría que es una fiesta para Miami Beach.
El
programa de la feria abarca una gran cantidad de galerías de todo el mundo,
incluyendo muchas latinoamericanas que presentan, algunas con mucho
cuidado en cuanto a la calidad de las obras y artistas presentados y otras me
parecieron un lugar común. Poquísima o ninguna presencia de las galerías
nacionales, no así de obras de venezolanos, pues pude ver obras del mencionado
Cruz-Diez, así como de Jesús Soto. Entre las obras destacaba no solo por el
olor sino por el colorido y el espacio tomado la de brasilero Paolo Nazareth,
con un carro lleno o mejor atiborrado de cambures que salían por las ventanas,
muy pintoresco como sí se tratase de los camiones que llaman a las personas
para que compre plátanos o cambures.
Otro
artista que no quiero dejar de mencionar es el artista chino Ai Weiwei, desde
que entre en el pasillo pude ver su obra “Árbol”, la cual toma mayor relevancia
por su situación personal de perseguido del gobierno chino.
Y por
supuesto siempre es muy confortante ver las obras de los grandes maestros
universales Marcel Duchamp, Pablo Picasso, Andy Warhol, Joan Miró, entre otros.
Eran alrededor de 300 galerías y 2000 artistas.
La
fotografía de gran formato se convirtió en la gran protagonista de la feria,
sobre todo la de los artistas chinos.
En general
la presencia de videos y todo lo referente al arte multimedia no tuve el tiempo
suficiente para dar una opinión objetiva, pero prometo para el año que viene sí
dedicarle un poco más, aunque creo que no era para nada la atracción de la
feria.
Nancy
Farfán
Miami
Beach, 2011